El derecho concursal es la rama del derecho mercantil que regula las posibles soluciones ante la insolvencia de un deudor. Descubre en qué consiste, sus funciones, objetivos y aplicación.

Las circunstancias económicas pueden hacer que una empresa o una persona física que ha contraído deudas de distinto tipo no pueda afrontarlas. Se encontrará entonces en situación de insolvencia y, de acuerdo al principio de responsabilidad patrimonial que se recoge en la legislación vigente, cuando un deudor no cumple con su obligación el acreedor podrá dirigirse contra su patrimonio para dar satisfacción a la obligación que está incumpliendo, apoyándose para ello en un proceso judicial. El concurso de acreedores es, por tanto, el procedimiento a elegir en estos casos, encontrándose regulado en la Ley 22/2003 de 9 de julio y en el Real Decreto Legislativo 1/2020 de 5 de mayo

El derecho concursal es la rama jurídica que se encarga de dar respuesta a esta pregunta, pues es el cuerpo normativo que ofrece distintas soluciones a estas situaciones de insolvencia. La intención siempre será que deudor y acreedores encuentren un acuerdo que satisfaga los intereses de ambas partes y, si no fuera posible, que se establezca el mecanismo de liquidación ordenada de la compañía, siempre que el deudor no pueda cumplir sus obligaciones de pago, ya sea por falta de bienes como por falta de liquidez.

El procedimiento concursal requiere un profundo conocimiento tanto de las leyes mercantiles y civiles como de las procesales, ya que en el inciden aspectos de diversa índole jurídica, y por tanto es necesario conocer la legislación aplicable al caso en concreto